
La Excelencia Operacional es mucho más que un simple término de moda en el mundo empresarial; es una filosofía integral que abarca todos los aspectos de una organización. Aunque la optimización de operaciones es una parte crucial de esta estrategia, no es el único elemento que define su éxito.
Según un artículo de Forbes, “Las empresas que implementan prácticas de excelencia operacional reportan una mejora del 10% en eficiencia y una reducción del 15% en costos operativos” (Forbes, 2023).
Es importante entender cómo interactúan y se interrelacionan el capital humano, la cultura organizacional, las herramientas y los procesos en conjunto. Este enfoque holístico permite a las empresas no solo alcanzar eficiencia, sino también construir una base sólida para el crecimiento sostenible.
El corazón de la Excelencia Operacional implica dos pilares fundamentales: Las Personas y Los Procesos. La primera piedra angular, es el capital humano, el motor detrás de la cultura y la metodología de la empresa. Sin una inversión adecuada en el desarrollo y la gestión de las personas, incluso las mejores prácticas operativas pueden no ser suficientes.
Por otro lado, los procesos deben ser constantemente optimizados, estandarizados y adaptados para asegurar la máxima eficiencia y rentabilidad. Comprender y aplicar estos principios de manera integral es esencial para evitar inconvenientes que puedan comprometer la sostenibilidad y el éxito a largo plazo de cualquier organización.
Acá te muestro algunos puntos a considerar para encaminar a tu empresa hacia una excelencia operacional:
- Importancia de las Personas:
- La gestión de personas es clave para el desarrollo organizacional.
- Las personas son el activo más valioso y fundamentales para establecer la cultura y metodología de la empresa.
- La administración de personas es responsabilidad del área de recursos humanos, mientras que la dirección directa debe ser gestionada por los líderes de equipo.
- La inversión en el análisis estratégico, táctico y operativo del equipo es esencial para lograr resultados óptimos.
- Desarrollo y Cultura:
- Fomentar un sentimiento de pertenencia y compromiso es crucial.
- Es necesario crear, estructurar y desarrollar orgánicas formales y estructuras participativas.
- La educación continua y la disciplina son vitales para establecer hábitos efectivos.
- Incorporar principios como Lean Kaizen Management y desarrollar una cultura basada en estos principios es fundamental para la mejora continua.
- Optimización de Procesos:
- La mejora continua debe ser el enfoque principal para maximizar la rentabilidad y el uso de recursos.
- Se debe trabajar hacia la reducción de desperdicios y fallos, maximizando el uso de nuestros recursos empresariales. Dejar de despilfarrar recursos escenciales, ya sean materiales, humanos o tiempo: Cero accidentes, Cero defectos, Cero fallas, Cero pérdidas, Cero desperdicios.
- La observación y análisis cuidadoso de los procesos es esencial para identificar fallas y realizar ajustes necesarios. Debemos tomar el tiempo de mirar sigilosamente y preguntarnos donde esta la falla, siempre hay una falla. Identificamos el problema y sentimos sus sintomas, sus eventos, sus efectos, los hechos concretos , las consecuencia hasta encontrar la causa raíz. Es entonces cuando llegamos a entender los cambios o ajustes que requieren nuestros procesos, nuestros métodos, nuestra lógica. Así luego, logramos ascender un peldaño en la escalera de la Excelencia Operacional. Sin este espacio de reflexión no es es fácil lograrlo, la rueda gira muy rápido para notar sus defectos.
La ausencia de Excelencia Operacional puede desencadenar varios problemas y desafíos que afectan negativamente su desempeño y sostenibilidad.
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- Sin procesos estandarizados ni optimizados, la organización puede enfrentar altos niveles de ineficiencia, desperdicio de recursos y costos innecesarios. Esto puede manifestarse en tiempos de producción largos, altos niveles de inventario no utilizado y costos operativos elevados.
- Comienza a generarse una baja calidad de los productos y servicios comercializados. La falta de estándares y controles rigurosos generar una calidad insuficiente en los productos o servicios, lo que puede resultar en defectos, devoluciones, inconformidad de los clientes y dañar la imagen de la organización.
- También comienza a verse un desmedro en la capacidad de competir en el mercado. Las organizaciones que no optimizan sus operaciones comienzan a quedar rezagadas frente a la competencia, que sí logra ser más eficiente y ofrecer mejores precios, calidad o tiempos de entrega.
- Por supuesto, todo lo anterior comienza a impactar en los costos y la baja eficiencia pueden llevar a márgenes de ganancia reducidos.
Si reconoces alguno de estos problemas, entonces te invito a conocer Atipic, una empresa de sostenibilidad empresarial a la medida, que te ayudará a enfrentar de mejor manera el futuro de tu organización.